Septiembre todavía es un buen mes para realizar el Camino de Santiago, ya que el clima es agradable, las multitudes son menos densas que en el verano y el entorno natural es hermoso. Sin embargo, sigue siendo importante planificar y reservar con anticipación para garantizar una experiencia fluida y agradable. Pero asegúrate de llevar ropa adecuada para cambios de temperatura y lluvias, nunca olvides los guantes y las gafas de viento/sol, y elige unas alforjas impermeables.

Y cuidado en zonas secas y pistas o senderos con arbustos a los lados, porque en esta época es habitual tener pinchazos múltiples con espinas como estas, que si no llevas suficientes parches… la ruta se te podría complicar, ya que cuando pasas por una zona de estas, lo habitual es que se te claven de 3 a 5 pinchos en cada rueda hasta que te das cuenta de que los llevas clavados. En estos casos, puede ser mejor NO sacar el clavo, ya que según como quede, el propio clavo hace de tapón, y el aire se sale muy lentamente, con lo que quizás llegues a un lugar mejor para reparar, mientras que si lo sacas, la rueda se desinflará en cuestión de segundos.

Para salir de una situación así,  puede ser útil llevar un spray de espuma auto-reparadora, y aunque con el tiempo se secará y tendrás que cambiar la cámara, al menos podrás salir de esa zona de una forma airosa.  

En breve, incorporaremos como opcional, sistemas anti-pinchazos de alta fiabilidad.